los ratos.

Nos quedan los ratos...

No sé porque pasan estas cosas a estas edades,
querría darte ilusiones y juventud plena pero ya pasaron,
nos quedan los ratos.

Tu sabes bien la vida pasada de entrega que nos enterró la esperanza,
yo sé que lo sabes y por eso te amo...
pero si hay peros.
Hay peros absurdos que debería desterrar y que me acosan.

Hay días, jueves, en que todo se aclara con una mirada a tus ojos.
se crean espectativas de blues, de ciudades santas o playas divertidas de nudismo
pero quiero el más que quizás no llegue.

Es el destino temporal el que nos conforma con los ratos,
esos ratos ciertos repletos de la ternura añorada
cuando me dices te quiero y yo te lo repito por hacerlo realidad.

Yo sé que los ratos seguirán ahí,entreteniéndonos la vida
como las peliculas de woody allen o las canciones de sabina,
pero lo pasado ha dejado huella y duele a veces el odio.

Tampoco quiero mentir, el odio conforta,
porque nos afirma en lo cruel y maligno para desdecirlo y aborrecerlo
tanto como tu me haces amar.

Está la tarde rara y nublada, unas nubes espesas en este final de julio
acompañan mi soledad mientras tus puertas están siendo colocadas
en sus quicios desquiciados.

Esta tarde rara y nublada me deja los ratos para pensarte,
para deshacer la madeja de las ilusiones nuevas,
¿cuál será la siguiente?

Añoro cada mañana tu cuerpo a mi lado con una certeza
que me hace desear esa añoranza porque ya me creo sabio,
y sólo nos quedan los ratos, ni semillas ni pasiones alimentarán nuestra unión.

Ratos nos quedan sobrados de felicidad simple y serena
porque ya hemos vivido muchas veces
destierros de seres infames.

Así que dame tus ratos porque ya sé
que la puerta de Leroy merlin no es ningún sitio romántico
ni maldito romanticismo quiero para nuestros sentimientos.

Ratos quiero de tu mirada dulce a veces días o semanas,
tiempo quiero de tu olor y tus caricias.
Poemas tengo para seguir escribiendo hasta que me lleven allí,
donde el olvido es cierto.

Dame ratos.